Finalmente, Canonical anunció la versión de Ubuntu para móviles, y lo
hizo en grande, ya que ha despertado los mejores comentarios desde
diversos sectores. Y uno de sus puntos más destacados lo encontramos en
su interfaz, que no parece ninguna copia de los sistemas operativos
móviles que existen en la actualidad, sino que ofrece una visión fresca,
única y muy atractiva.Mark Shuttleworth, el director ejecutivo de Canonical, fue quien presentó el nuevo sistema operativo móvil Ubuntu, como verán en el video que les dejo al final de esta nota. Ahí, nos dio a conocer lo que él llamó una ‘pantalla de bienvenida’, en vez de una pantalla de bloqueo, ya que el usuario podrá acceder a sus aplicaciones favoritas deslizando su dedo desde el lado izquierdo, mientras que si lo hace desde el lado derecho, podrá acceder directamente a las aplicaciones que se encuentran en ejecución. En resumen, es una pantalla artística y personalizada que evoluciona con el mismo usuario.
Otro de los puntos importantes de Ubuntu para dispositivos móviles, es su capacidad para ser utilizado con un monitor, un teclado y un mouse, a fin de transformar el móvil en un ordenador de escritorio completo. Aquí, es válido mencionar también que Ubuntu móvil soporta procesadores x86, así como chips ARM, y no depende de una máquina virtual de Java.
Ahora, ¿qué aspecto podría tener Ubuntu móvil en contra? Pues el de estar en un segmento copado por iOS y Android, y en el que Windows Phone 8 y BlackBerry 10 pugnan por un tercer puesto más decente. El espacio que tiene Ubuntu en el mercado es muy poco, y si quiere sobresalir, deberá aprovechar todas las oportunidades que tenga, sin fallar en ninguna, ya que un paso en falso lo podría hacer caer para siempre.
‘Estamos seguros de que Ubuntu llegará a los móviles desde grandes fabricantes en 2013′, mencionó Shuttleworth en una reciente ocasión. ‘Una de las visiones más importantes es la completa convergencia de la plataforma desde el teléfono hasta la supercomputadora’.
Finalmente, habrá que ver si, realmente, los fabricantes están ‘hambrientos por otro socio’ dentro de los sistema operativos, como señala Shuttleworth. Esperemos que sí, por el bien de los usuarios.
