Los hombres y las mujeres miran fijamente escáneres faciales, además de pasar por los torniquetes de seguridad usando sus tarjetas de bandas magnéticas . Los estrictos controles de identidad están ahí para asegurarse de que no trabajen demasiadas horas extraordinarias. El proceso toma menos de dos segundos.
Este es el ámbito en el que se hacen los smartphones más rentables del mundo, parte de la cadena de suministro muy bien guardado de Apple Inc.. Después de años de acusaciones de que los empleados en China fueron obligados a trabajar largas, agotadoras horas, Pegatron y Apple ha adoptado nuevos procedimientos para fabricar teléfonos iPhone sin acumular exceso de horas extraordinarias en sus empleados. Están ansiosos de mostrar cómo funciona el sistema, y por primera vez están concediendo un acceso a periodistas al interior del santuario occidental.
John Sheu, conocido en la fábrica como Big John, o el Alcalde, está dando la gira con un reportero de Bloomberg. Es el presidente de la Fábrica Pegatron, donde hasta 50.000 personas se reúnen para producir iPhones. Su trabajo es asegurarse de que se pasa más tiempo haciendo los teléfonos en lugar de gastarlo en distracciones improductivas, como pasar lista y los controles de identidad.
"Cada segundo cuenta", Big John.
Después de pasar por los detectores de metales para olfatear dispositivos equipados con cámaras que podrían ser utilizados para filtrar las imágenes de nuevos productos inéditos, los trabajadores siguen las flechas en el suelo y carteles en la pared. Suben una escalera cubiertas con mallas de seguridad, para evitar accidentes-o intentos de suicidio. En un banco de taquillas, dan redes para el cabello y cambian sus zapatos por zapatillas limpias de plástico. A las 9:20 am, las líneas de producción de la unidad 320 deben encontrase listas para el inicio de trabajo, esto se hace hasta con precisión militar en cuatro filas para su pase de lista.
"Buenos días!", Gritan al unísono bajo la mirada vigilante del Alcalde, que se une por supervisores de turno que sostienen iPads. Ellos chequean a los trabajadores. Seis minutos más tarde, están en la planta de producción, el montaje de los teléfonos inteligentes que se mueven más allá de las cintas transportadoras. En el día de la visita, un ensamblador estaba de baja por enfermedad, por lo que el jefe de turno rápidamente ajustó la línea para asegurarse de que no hay pérdida de tiempo en la producción.
La fábrica ubicada en la esquina de las carreteras Xiu Yan Jiang y Shen es una de las instalaciones más secretas en la producción de iPhone en el mundo y cubre un área equivalente a casi 90 campos de fútbol. En el centro se encuentra una plaza con una oficina de bomberos, estación de policía. Hay autobuses, mega-cafeterías, jardines paisajísticos y estanques de peces. Los edificios de hormigón gris y marrón tienen la intención de evocar la arquitectura tradicional china. Está ubicada cerca del nuevo Shanghai Disneyland, que abre sus puertas en junio, este se encuentra a 20 minutos en coche.
"El hecho de que permita que un reportero de espectáculos, significa que están respondiendo a la presión externa y tratando de ser más transparentes, al menos en la superficie que están tratando de arreglar algo," dijo Jenny Chan, profesor de la Universidad de Oxford Kellogg. "Pero siguen siendo silenciosos en como se manejan en el negocio, y todo el sistema de trabajo."
En el interior, la fábrica todavía esconde un secreto, según China Labor Watch. El salario base se mantiene tan baja que los trabajadores necesitan tiempo extra simplemente a fin de mes, dijo el grupo de defensa. Se dijo que 1.261 recibos de pago de las instalaciones de Shanghai Pegatron a partir de septiembre y octubre el año 2015 muestran evidencia de exceso de horas extraordinarias. Pegatron, una spin-off Asustek, es fabricante de productos electrónicos de contrato más grande del mundo después de Foxconn, según Bloomberg.
Pegatron replicó diciendo el grupo de contadores realizó mal las cuentas, en relación al período sobre los días festivos estatales, cuando la paga era tres veces más de normal. Apple y Pegatron dicen que nunca fueron contactados por Labor Watch China, que dijo que se acercó a Apple, pero no recibió una respuesta. Desde marzo, el grupo dijo que ha recogido un adicional de 441 recibos de pago que apuntan a la continua exceso de horas extraordinarias.
"El sistema de torniquete, es toda la programación de marcaje de horas", dijo Li Qiang, director ejecutivo de China Labor Watch. Sugirió que los controles de identidad eran sólo para identificación", de lo contrario no habría tantos casos con cientos de trabajadores poniendo en horas extras excesivas."
Pegatron dijo que se adhiere a la Electronic Industry Citizenship Coalition directrices 's que tapa tiempo suplementario en alrededor de 80 horas al mes. Apple dijo que sus proveedores se adhieren al código de conducta del grupo de la industria, mientras que Pegatron lo dijo y otros fabricantes están exentos del máximo de 36 horas extraordinarias al mes como se contemplan en el estado de China.
Para Tim Cook, CEO de Apple, el escrutinio es un desafío directo a la cadena de suministro global cuidadosamente montado que construyó como jefe de operaciones en el marco del fallecido Steve Jobs. El fabricante del iPhone, dijo que realizó 640 auditorias que cubre más de 1,6 millones de trabajadores en 2015. En 2013, Apple envió a expertos médicos para investigar una serie de muertes de trabajadores a Pegatron. El caso de un joven de 15 años de edad que murió de neumonía y la causa de la muerte para otros no fue revelado. Apple dijo que no encontró ninguna relación con las condiciones de trabajo.
"La fabricación no es un pecado", dijo Denese Yao, que supervisa la relación de Pegatron con su potente cliente en Cupertino, California. "La gente piensa que sólo estamos exprimiendo todo de los trabajadores", dijo durante la gira, a pesar de que estaba llamando a través de una videoconferencia desde la sede de Pegatron en Taipei. "Tenemos que hacerles saber lo que es un entorno de trabajo eficiente y responsable".
Para hacer eso, Pegatron adoptó el nuevo sistema de identificación, con las divisas vinculadas a una base de datos que registra el tiempo, los salarios e incluso los gastos en honorarios del dormitorio y el almuerzo. La disposición ha ayudado a impulsar el cumplimiento de las regulaciones del tiempo extra a casi el 100 por ciento, dijo Pegatron, con sólo un puñado de excepciones derivadas de ingenieros trabajando en las reparaciones de emergencia. En su última auditaría , Apple dijo que proveedores cumplen con la semana laboral de 60 horas fue del 97 por ciento en 2015, un 5 por ciento respecto al año anterior.
Algunos trabajadores realmente aprecian la oportunidad de aumentar sus salarios pero que la práctica ha disminuido, dijo un trabajador Pegatron se refirió a Bloomberg por Labor Watch China, que sólo se revele su apellido Ma por temor a represalias. "El máximo es de 60, pero los trabajadores preferiría más horas porque los salarios son bajos", dijo Ma. "Podemos ganar mucho más en el tiempo extra, por lo que siempre quieren más horas extras."
"Todas las empresas están ajustando los salarios, las prestaciones y la vivienda", dijo Jiang Ying, profesor de derecho del trabajo en el Instituto Chino de Relaciones Industriales. "Los trabajadores tienen una mayor conciencia de la ley y eso ha empujado las fábricas para mejorar."
Al mismo tiempo, las fábricas de China están encontrando dificultades para encontrar y mantener a la gente, y se ve como la fuerza de trabajo se reduce. Aún así, las tasas de retención en la fábrica de Shanghai de Pegatron han aumentado un 20 por ciento al año durante los últimos tres años, según Sheu. El año pasado, la facturación promedio fue de alrededor del 16 por ciento.
De vuelta en la cafetería, un grupo de mujeres se apresuran a terminar el almuerzo antes de su descanso de 50 minutos ha terminado. Provienen de toda China, a partir de Sichuan, en el oeste de Shandong, en el noreste. Ninguno de ellos ha estado allí por más de unos pocos meses.
"Este es relajado en comparación con otras fábricas", dijo Xu Na, 30, que siguió a su hermano más joven a trabajar en la fábrica. "Nunca trabajamos más de 60 horas."
